Nicolás es un chico de 19 años. Esta desnudo en el baño. Se mira en el espejo con amargura. Se ve feo. Muy feo. En realidad es poco agraciado y eso lo tiene muy amargado.
--Mira lo que eres... Con esta cara ¿¿como quieres que nadie se ría de ti?
Está acostumbrado a hablar consigo mismo.
--Nadie te da bola... Te ven esa cara y se ríen de ti...
Se siente solo.
--¿con este cuerpo quieres que un chico se fije en ti... ¡¡Nunca...¡ Siempre estarás solo... ¡¡Solo¡¡
Se le escapa alguna lágrimas. Se abre la puerta del baño precipitadamente. Entra un atractivo hombre de 30 años, ¡es idéntico a David¡. Está en slips. Nicolás lo trata con odio pero lo mira con deseo.
--¿¿¡qué haces, Mario? ¡¡¿no ves que estoy yo??¡
El hombre no le hace caso, se quita el slips. A Nicolás se le van los ojos tras el cuerpo desnudo de ese hombre.
--¡¡ya llevas una hora en el baño... me vas a hacer llegar tarde a la fábrica...¡ ¡¡y tú también vas a llegar tarde...¡
Nicolás mira a ese hombre con sentimientos extraños. No sabe si lo odia más o lo desea.
--si, jefe --le dice con ironía.
Mario se mete en la ducha. A Nicolás le encanta verlo en la ducha. Ver como se toca el pecho y sobretodo los genitales. Está ardiendo. Mario no se da cuenta con los ojos que lo mira ese chico:
--¿¿y a ti que te pasa?¡
Nicolás fuerza una sonrisa:
--No, nada... nada...
Mario tiene los ojos cerrados aunque va hablando y lo que permite que Nicolás se deleite con su desnudez.
--Siempre estás soñando despierto... Así no vas a llegar a ningún sitio, Nico.
--Nicolás... Me llamo Nicolás...
Mario no le hace caso. A Nicolás le duele que ese hombre no sea suyo.
--He pensado que hoy podía tomarme fiesta... Es que como mañana comienza el curso... tengo cosas que preparar...
Mario se acerca a Nicolás que vibra al tenerlo desnudo y tan cerca de él.
--¡¡pero es en la noche¡¡
Se hace un silencio. Finalmente Mario dice:
--Está bien pero a ver si este año apruebas... ¡con 19 años yo ya estaba acabando la carrera y tú aún estás en la secundario¡ Debes ser el hazmerreír de la clase...
Mario no dice nada pero le duele ese comentario.
--lo soy pero por otros motivos --dice con amargura.
--hay muchos de mi edad y hasta de más--dice Nicolás.
Mario lo mira regañón:
--no creo en todo caso eso no te justifica... te tienes que aplicar más...
--¡¡¡bueno... perdón... señor sabelotodo...¡¡
A Mario le ha dolido el tono en el que el chico lo ha tratado.
En otro lado de la ciudad, un chico sale del baño con jeans pero sin camisa.
--ya está el grifo no te dará problemas...
Una chica, una joven rubia de 18 años le da las gracias:
--Gracias Facha... si hubiera tenido que llamar a alguien me habría costado muy caro. Y tampoco sabía a quien llamar...
--No hay de qué Olivia... además soy el mejor amigo de tu novio... En mi puedes contar para lo que quieras...
A Olivia le pone un poco nervioso la mirada de depravado de ese chico, le pasa un trapo para que se limpie él la agarra de las manos y trata de besarla. Ella lo rechaza pero él siente su deseo.
--no Facha... ¿¿qué haces?
Es un tono que pretende mostrar molesto pero en realidad no es así. Olivia se siente arrastrada hacia ese guapo chico pero siente que no puede.
--¡¡tu novio es mi amigo...¡
Pero Facha la estrecha entre sus brazos:
--yo sé que él no te da lo que necesita una mujer...
Están apunto de besarse pero ella lo bofetea:
--¡¡vete y no vuelvas¡
Él toma su camisa. Se nota que ha dejado a la chica impactada. En el ascensor sonríe:
--si supieras que tu novio se quiso acostar conmigo... Cuando te canses de jugar con esa niñita buscarás un hombre de verdad...
Mientras un guapo joven de 20 años está fornicando con un cubano 10 años mayor. Es algo que disfruta mucho. Están en un pequeño estudio. El chico queda como en shock:
--es fantástico... ¡¡ha sido genial¡ --resopla.
--Ya te dije que sería el polvo de tu vida... ahora págame...
El chico lo mira sorprendido:
--¿¿qué? ¡¡no quedamos en nada...¡
Están en el estudio de él y el cubano le ha grabado en video cámara sin que lo supieras:
--¿que dirían los tuyos si vieran este video?
El chico no puede creer que lo que le está pasando.
--¡¡no me vas a hacer chantaje¡
El cubano lo mira con un tono amenazante pero que pretende ser de buena onda:
--te puedo hundir... Rubén es que te llamas ¿no? --el chico hace que sí con la cabeza-- tú me pagas por el buen rato que te he hecho pasar y se acabó...
Rubén se viste a toda prisa:
--¡¡no me vas a hacer chantaje...¡
Se va corriendo. El cubano no esperaba esa reacción:
--te puedo hundir...
Rubén se va sofocado a una cita. Se lo ha pasado en grande pero ahora siente culpa.
--¡¡ojalá nunca le hubiera hablado...¡
Trata de calmarse. Olivia lo espera en un parque. Llega tarde, ella desea abrazarlo. El uno corre hacia el otro. Se abrazan. Ella echa de menos la pasión que le ha hecho sentir Facha pero lo quiere a él. Rubén aun tiene en su cuerpo el olor del cubano. Es la pasión pero la ternura es Olivia. El uno es el refugio del otro. Se besan, es un beso de ternura con gusto a otros labios más apasionados. Rubén nota a Olivia algo angustiada.
--¿te ocurre algo?
Olivia trata de disimular. No le puede decir a su novio que su mejor amigo la ha querido seducir y lo peor, que a ella le ha gustado. También lo nota raro.
--¿y a ti?
Aunque su piel aún tiembla por el rico cubano que ha saboreado, Rubén mira a los ojos a su novia y se le olvida todo:
--que te quiero mucho...
Olivia lo acaricia:
--Yo también... yo también...
La pareja sale a pasear muy abrazada. Entre los dos hay un gran cariño.
--sabes lo que me gustaría hacer ahora...
--qué? --dice él sonriente.
--en mi casa no hay nadie, me gustaría que fuéramos y que me hicieras el amor...
Olivia se quiere convencer que Rubén puede ser tan apasionado como Facha. Rubén pone mala cara:
--¿a estas horas? ¿hacer el amor? ¡¡estás loca¡
--no hay hora para el amor...
Rubén no sabe que decir. Balbucea. A Olivia le duele que siempre trata de buscar una excusa para no estar con ella:
--es que solo una vez al mes como mucho... parece que hagamos el amor con obligación...
Rubén tiene miedo que Olivia se dé cuenta que su falta de pasión en la cama es porque le atraen los hombres. La quiere mucho y no desea perderla.
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